Desde las empresas del sector, no anticiparon aún el porcentaje de incremento que podrían aplicar a partir del primer fin de semana de diciembre, pero estimaron que al trasladar el impuesto a los precios no les quedará demasiado espacio: “El aumento de impuestos nos fija un piso alto”, indicaron.
“Se debería actualizar el impuesto a los combustibles líquidos y al dióxido de carbono a partir del 1° de diciembre. Es un 12,56% del total de impuestos, pero quedaría aproximadamente en un 2,4% para la nafta súper; un 2,1% para la nafta premium; un 1,7% para el diésel; y un 1,5% para el diésel premium”, detalló Gabriel Bornoroni, presidente de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la República Argentina (Cecha) a Infobae.