La deuda forma parte del presupuesto para su funcionamiento, y debido a esa faltante hay varias obras y proyectos que no pudieron llevarse a cabo este año. De acuerdo al área contable de la Universidad, ese dinero figura en el presupuesto anual.
El rector de la UNSL, Víctor Moriñigo, afirmó que desde la última etapa del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner “nos venimos acostumbrando a que nos paguen con demoras; aunque nunca tanto como ahora”.
El titular de la casa de estudios remarcó que, producto de esos retrasos, muchas veces deben detener obras de infraestructura. “Afecta la planificación que uno tenía prevista y uno, por prudencia va tratando de no dar pasos agigantados, si no más cortitos, más seguros, para no tomar alguna decisión que pueda herir el funcionamiento. El problema es que no tenemos previsibilidad, porque no nos dicen cuándo nos van a pagar”, narró.
Moriñigo señaló que, tras las elecciones, los trámites se complicaron aún más. “Estamos esperando las certezas a partir del 10 de diciembre, cuál va a ser el modelo que vamos a seguir, y quienes van a conducir el Ministerio de Educación”.
De todas maneras, destacó que la UNSL logró hasta el momento mantener los salarios al día, al igual que el pago de servicios y proveedores. San Luis 24
