El Consejo de Seguridad de la ONU celebró una reunión de emergencia para condenar los lanzamientos, pero China y Rusia culparon a Washington por la escalada de tensiones.
Corea del Norte realizó un simulacro, lanzando cuatro misiles de crucero “estratégicos” para “demostrar” su “fuerza”, informó la prensa local.
Se trata de una serie de demostraciones por las que el Consejo de Seguridad de la ONU celebró una reunión de emergencia, ya que se suma a un misil balístico intercontinental lanzado el sábado por Pyongyang y dos misiles de corto alcance el día lunes,
“La comisión militar central del Partido del Trabajo de Corea expresó su gran satisfacción sobre los resultados de estos lanzamientos”, informó la agencia oficial KCNA.
Los cuatro misiles Hwasal-2 fueron lanzados desde la localidad de Kim Chaek, provincia de Hamgyong del Norte, en el centro-este del país, hacia el mar de Japón, indicó la agencia, y agregó que recorrieron 2.000 kilómetros antes de impactar “con precisión” en su objetivo.
Fue el último de una serie de provocativos lanzamientos de misiles por parte de Pyongyang, que hacen temer con un eventual ensayo nuclear por primera vez desde 2017.
Estados Unidos y sus aliados instaron el lunes al Consejo de Seguridad de la ONU a condenar los lanzamientos ilegales de misiles balísticos de Corea del Norte, pero China y Rusia culparon a Washington por la escalada de tensiones con ejercicios militares intensificados contra Pyongyang.
Los 15 integrantes del Consejo debían estar de acuerdo en condenar los lanzamientos de misiles e instar a Pyongyang a cumplir con las normas de seguridad de la ONU, sin embargo, China y Rusia señalaron que lo que se necesita ahora es un diálogo entre Corea del Norte y la administración de Joe Biden, una reducción de los ejercicios militares, una relajación de las sanciones contra Pyongyang.
El gobierno de Corea del Norte acusó al secretario general de la ONU, António Gutierres, de “una actitud extremadamente injusta y desequilibrada, porque condena nuestra prueba de misiles pero ignora las hostilidades de los Estados Unidos”.
La acusación coincidió con la participación de destructores de Estados Unidos, Corea del Sur y Japón en entrenamientos trilaterales antimisiles cerca de la península coreana.
